No se discute en lo absoluto que el ProCreAr es el Programa de acceso a la vivienda Propia para la clase media argentina más importante de los últimos 50 años y por sus números crecientes el impacto en cantidad de beneficiarios lo posicionará, si esto sigue como la Presidenta lo anunció hasta el 2015, en el más eficiente de la historia de nuestro país, siempre especificando el sector de población al que asiste.
Sin embargo, la matriz de pensamiento que subyace bajo la operatoria tiene al menos dos posibles interpretaciones, que pueden jugarle como falla estructural, comprometiendo toda la instrumentación del programa.
Un diseño de aplicación basado en los antiguos préstamos del BHN de la primer época peronista, que beneficiaron a sectores de clase media poseedores de suelo, con modelos de vivienda provistos por el Estado, fue una mirada inicial que como sucedió, iba a ser de corto alcance, dados e identificados, dos problemas estructurales que diferencian el contexto urbano actual del otrora tiempo peronista. El primero es el empobrecimiento de la clase media con respecto al acceso al suelo y a la compra de terrenos como resguardo de capital, costumbre argentina si las hay, que era frecuente. El otro problema, a diferencia del '45, es la gran dispersión urbana caracterizada además por la segregación social que modela la ciudad argentina de hoy, segregación que fomenta y alimenta el gusto de las clases sociales medias altas de vivir en los countries o barrios parques, alejados de la "condición urbana" vista como degradada (muy real en la mayoría de los casos por cierto) , y al mejor estilo americano...pero sin las autopistas, sin los servicios y equipamientos y con altísimos costes de mantenimiento al erario público en transporte, recolección de residuos y ociosidad de sectores infraestructurados de baja densidad que quedan abandonados de inversión privada que los sostenga.
La segunda posible interpretación que subyace bajo la operatoria es aún más compleja en sus efectos pero no menos nociva para el éxito del Programa en la concreción de sus objetivos, y es sin duda más nefasta desde la mirada antropológica que caracteriza esta época neoliberal latinoamericana. El cruce de esta ideología por todos los estratos sociales de la "Era del vacío" , como llama Lipovepsky al post-modernismo, produjo cambios des-estructantes en el tejido social, quizás demasiado recientes para evaluar sus efectos positivos y negativos. Sin embargo podemos verificar al menos en nuestro país, que trajo consecuencias sociales profundas a las formas de organización comunitaria existentes, transformando los valores modernos de solidaridad, fraternidad y libertad en el marco del "para todos", donde pasaron a la historia los modos de organización comunitaria construídos por generaciones, desde los más básicos como sociedades de fomento y comisiones directivas de clubes a los más politizados como sindicatos y ONGs. Un claro ejemplo de este cambio lo retrató impecablemente el film "Luna de Avellaneda". del Director Juan José Campanella. Así los individuos se transformaron en los únicos protagonistas de la escena, con una exacerbación del yo por sobre el nosotros, comportamiento que bien supieron utilizar aquellos que la consecuente desmovilización social les permitió concentrar la riqueza en forma inédita, casi retrotrayéndo al mundo al tiempo medieval.También convino a los sectores conservadores más reaccionarios, los que a partir de prácticas genocidas, aprovecharon la instancia histórica para "desaparecer" a los "diferentes" instalando el pensamiento único de la Dictadura, donde el "cada uno en lo suyo, defendiendo lo nuestro" construyó el nuevo ser argentino, individualista y desconfiado de toda organización grupal, convencido que el futuro de cada quien depende del esfuerzo propio y las propias capacidades......
Por todo esto, no es difícil comprender que la matriz ideológica que subyace en el Programa haya confiado en que la mejor forma de garantizar el acceso a la vivienda ( jamás se planteó el acceso al Hábitat!!! otro de los problemas estructurales del Programa...) de la clase media, era la apuesta a la eficiencia individual de quien se va a organizar para resolver su propia conveniencia....Pero esta mirada que peca de neoliberal, solo demostró la ineficacia que como problema sistémico conlleva no poder abordarse desde las soluciones biográficas, planteo de Z. Bauman en su "Modernidad líquida", otra excelente mirada que nos completa el contexto de nuestro tiempo.
La última oferta del ProCreAr que supone resolver la realidad comentada de la escacés de ofertantes al crédito poseedores de suelo, terminó por poner en crisis toda la operación del programa. Primero por errores propios, ya que cualquier experto en políticas de Suelo sabe, que poner en oferta un valor tope para compra de terreno sin haber cerrado ciertas instrumentaciones en los Municipios, jurisdicción a la que corresponde el control sobre el uso y habilitación de suelo urbano, iba a producir una escalada de precios en el mercado de Suelo, que volvió inaccesible la totalidad del recurso, sea este con las condiciones apropiadas a los servicios de infraestructura o no. Segundo porque dejó totalmente indefensos a los adjudicatarios sorteados que individualmente carecen de posibilidades de canalizar su demanda ante la concentración del mercado de suelo y sus operadores, no articulándo política de adjudicación de suelo con los Municipios o con entidades intermedias como Sindicatos u ONGs desde Cáritas hasta Madre Tierra ....lo que denota la escasa confianza del gobierno en estas estructuras...no sin razón, pero trasuntando un sistema organizacional neoliberal que tampoco ayuda a lograr el objetivo: un Estado que garantiza el Derecho no solo a la Vivienda, sino a la Ciudad.
En este marco, los vecinos, adjudicatarios x sorteo del ProCreAr , se auto-convocaron y auto-organizaron, comportamiento social que pone Esperanza en la recuperación de algunos valores sociales de la modernidad perdida..., y ejercieron presión ante las autoridades locales para que intercedan en el mercado y así poder acceder al suelo en condiciones de escrituración, prerrogativa del BHN para acceder al crédito. La respuesta del Municipio, merece un artículo especial, dada la inconsistencia y desarticulación de instrumentos de Políticas de Suelo que propuso y aprobó en medio de presiones por derecha e izquierda en el HCD local, pero básicamente no instrumentó ni resolvió el acceso al Suelo para el Programa y menos definió las estrategias de Desarrollo de una ciudad vacía, dispersa y segregada , y sí en cambio habilitó a la Oficina Pública que maneja el planeamiento urbano a disponer de trato directo con poseedores de suelo en la Periferia de la Ciudad, a resolver en forma personalizada... quien se va a beneficiar con la increíble posibilidad de obtener sin costo, el permiso de lotear sin previa obra de infraestructuras...que además pagaría el Estado Nacional desde la operatoria. Recordemos que el valor del suelo en Macizo de la periferia sin servicios , se multiplica al menos x 10 al momento de generar un lote urbano.La pregunta es ¿quién se queda con la increíble diferencia?El lote resultante, ¿tiene garantizado el goce del Derecho a la Ciudad que establece acceder a TODOS los servicios de infraestructura, no solo agua y luz como requiere de mínima la ley de subdivisión vigente, y además todos los equipamientos : escuelas, hospitales, lugares de esparcimiento cubierto y espacios verdes diseñados, transporte público y demás indicadores de calidad de Vida Urbana?
¿Hay Soluciones? por supuesto que hay, y muchas de las instrumentaciones posibles están nombradas en la ordenanza aprobada , que suntuosamente se denominó de Políticas de Suelo desde el Municipio. Instrumentaciones que estaban a disposición ya, antes de nombrarlas en la ordenanza, vigentes al momento de aprobarse a Ley de Acceso justo al Habitat en la Prov. de Buenos Aires e inclusive desde la Ley 8912 de Uso del Suelo, desde 1977. Lo único que se necesita es decisión política y capacidad técnica, pero también, y no es menor, la capacidad de VER POLITICAMENTE DESDE EL PROYECTO NACIONAL Y POPULAR. Ver cómo , esta increíble suma de dinero que va a aportar el Estado Nacional en Vivienda para la ciudad de Bahia Blanca, que duplica el presupuesto del Municipio, se oriente al mejor Desarrollo Urbano de la Ciudad, asumiendo como Estado Municipal, el rol que le compete en la eficacia de la asignación de los recursos de todos, para que el impacto que produzca, multiplique y reparta los beneficios urbanos, convirtiendo al ProCreAr en la oportunidad histórica de cambiar las tendencias nefastas de segregación, pobreza y violencia que caracterizan nuestras ciudades, apostando a reconvertir a Bahia Blanca en un Habitat Inclusivo .Este es el Desafío, si realmente, queremos "ir por más".
La ciudad de La Plata, como ejemplo de lo debió ser en Bahía: http://www.andigital.com.ar/noticia.php?noticia_id=33690
ResponderEliminarEn Chaco, con los mismos problemas que en Bahía: http://www.diariochaco.com/noticia/creditos-procrear-beneficiarios-solicitan-capitanich-que-interceda-ante-subas-en-los-precios
ResponderEliminar